Hace un tiempo que algunas mujeres latinoamericanas me han pedido que les enseñe a entelar. Los pedidos llegaron desde México, Guatemala y Perú a través del sitio Multiply, donde tengo armado un lugar para mostrar mis artesanías enteladas.
Por otra parte en la ciudad de Buenos Aires un taller de arte me ofreció dar cursos de entelado. Pero desde marzo hasta la fecha no hubo respuesta por parte del público. No demostró interés en aprender a entelar.
La pregunta es porqué a tanto kilómetros de distancia hay expectativas por adquirir nuevos conocimientos o nuevas técnicas y acá a la vuelta de la esquina, no pasa nada. Será que nadie es profeta en su tierra u otro es el motivo del desinterés.
Son varias las preguntas y pocas las respuestas. Aunque tengo mis hipótesis. Supongo que algunos habrán evaluado que el trabajo de entelar es una tarea compleja. O no tendrán la menor idea que es entelar algo.
No tengo una idea precisa de porqué no hay interés en la ciudad de Buenos Aires y sus alrededores. Pero si tengo en claro que fuera de las fronteras del país hay mucho interés en aprender.
Tanto interés que me ha propuesto que haga cursos virtuales. La idea me ronda hace un tiempo por la cabeza. Pero, para realizarla hace falta conseguir anunciantes, porque gratis nadie trabaja.
Todo está por verse. Veremos que pasa con el transcurso del tiempo. A veces las cosas necesitan de un tiempo para madurar y dar sus frutos.
Mauricio Uldane
artesano entelador
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