jueves, 4 de febrero de 2010

Así lo hice (tercer entrega)

Los calendarios perpetuos

La patrona de mi mamá de un veraneo que pasó en la provincia de Córdoba le trajo un calendario perpetuo. El fin era que yo copiara el modelo para hacer algo parecido.

La pieza que trajo era bastante mala pero la idea era buena. Había visto esos calendarios en algunas casas del ramo pero nunca me habían interesado. Con la pieza en la mano decidí hacer un rediseño para adaptarla a mi trabajo de entelado. Para eso le cambié la disposición de los días, los meses y la fecha.

Además el objetivo era darle una mejor terminación a la pieza. Por ejemplo que todos los agujeros de las maderitas coincidieran en el perno de madera. Lo que hice a mi gusto fue el diseño de las maderitas que tienen los números, los días y los meses.

Al principio armé calendarios de mesa y de pared. Cada uno tenía un diseño diferente para lograr tener una línea que mantuviera el diseño armé una plantilla para reproducir el mismo calendario en el tiempo.

 



De Calendarios perpetuos



Eso fue hace unos diez años, ahí comencé con los calendarios perpetuos de pared que bauticé Fechela. Los hice entelados en jean, piqué, algodón y arpillera. También los hice y hago pintados en acrílico.


Antes los números y las letras de las maderitas los pintaba con pincel. Hoy los pinto usando un envase vacío de pintura bidimensional rellenado con pintura acrílica. Me sirve como lápiz y de paso el trazo tiene volumen con lo cual queda mucho mejor.

Básicamente la Fechela es un pedazo de fibrofácil (MDF) y las molduras son medios tubos de cartón. Que en realidad son cilindros de cartón, cortados por la mitad, donde viene enrollado el papel térmico que se usa en los fax. Las maderitas de números, meses y días son también de fibrofácil (MDF).


Años más tarde armé un calendario perpetuo de pared con un rollo de papel en la parte de abajo. Lo hice como regalo para mi amiga Mónica Savigliano. Además delante del rollo tenía una hoja de sierra júnior barnizada para poder cortar la tira de papel.

 



De Calendarios perpetuos


Terminé de incorporarlo como otra pieza en el catálogo de mis artesanías enteladas. Así nacieron las Fechapelas. Armé solamente dos piezas de este modelo que no ha tenido éxito como calendario y anotador. Veremos que pasa este año que recién comienza.


A mediados del 2009 el padre de mi amiga Inés Dzienczarski me encargó un calendario perpetuo de mesa. En realidad me pidió dos para llevar de regalo a la provincia de Tucumán en un viaje que tenía que realizar.

 



De Calendarios perpetuos


Un nuevo nacimiento tuvo lugar: las Fechamelas. Que tienen dos patas, que son dos tubos de cartón, las cuales están rellenadas con arena para que la pieza tenga peso propio y no se tumbe.


El diseño se mantiene aunque sean diferentes modelos de calendarios perpetuos. La idea es que tenga una coherencia como línea de calendarios.


Mauricio Uldane
artesano entelador