miércoles, 4 de junio de 2014

Un buzón muy pequeño

Mis artesanías enteladas siempre han tenido un fin útil. Ese fue el principal objetivo desde que en el año 1995 me comencé a dedicar a entelar objetos, de la más variada especie, que construía con mis manos.

Pero uno cambia con el transcurrir de los años y eso es bueno. Tener otra visión del trabajo que uno realiza es bueno para ver donde uno está parado. Además el mercado comprador también cambia con sus hábitos. Pero no es algo que me haya preocupado a lo largo de todos estos años. Si por eso fuera estaría haciendo otro tipo de artesanías y estaría corriendo detrás de los potenciales clientes con tal de tener una mísera venta.

Siempre pensé diferente, y así me ha ido con las ventas, pero soy consciente que mis artesanías enteladas no son fáciles de vender, aunque sea en una feria de artesanías. Los buzones alcancías siempre han sido, son y serán las piezas más atractivas que fabrico en forma totalmente artesanal.


Ahora les ofrezco una novedad absoluta para el concepto de mis artesanías enteladas: un pequeño buzón que solo es una pieza decorativa. No tiene otra función. No es una alcancía y es el más pequeño de los buzones que vengo realizando desde el año 2003. A lo largo de estos 11 años he realizado buzones chicos, medianos y grandes, estos últimos son los que se alquilan, y los he realizado a medida y a pedido del cliente, como el más reciente Buzón Fiorino.

El Buzonela Mini es solo un objeto decorativo, pero que está cargado de un gran simbolismo por lo que significa, para los argentinos, el clásico buzón rojo de correo que se solían encontrar en las esquinas de varias ciudades o pueblos de todo el país.

Todo fue gracias a un tubo de cartón que me encontré tirado en la calle, cuando regresaba a mi casa, luego de estar algunas horas en el ciber, donde edito y publico este texto, o mis sitios dedicados a los autos viejos, que se llama Archivo de autos. Eso porque no tengo conexión a Internet en mi casa. En ese tubo de cartón, automáticamente, vi la posibilidad de crear ese diminuto buzón de tan solo 12 centímetros y medio de altura.


Mi sobrino de tan solo 5 años de edad quedó fascinado con la pieza, ni bien se la mostré. Lo mismo que algunos de los integrantes del Auto Club San Miguel, donde concurrí con la rural Mercedes-Benz 170 SD modelo 1955 propiedad de mi padre, también quedaron impactados y contentos con ese pequeño buzón que solo es una pieza de adorno.

Hasta alguno intentó abrir la falsa puerta que está en su frente. Todas estas reacciones, que son habituales en los otros modelos de buzones, me reafirman que ese tubo de cartón no estaba tirado en vano en una de las avenidas de la ciudad de San Miguel, lugar donde vivo. Tuve suerte de pasar antes de los recicladores, o cartoneros como los llama el común de la gente.

Ese largo pedazo de cartón que iría a parar a la basura o su destino sería en convertirse en materia reciclable, para fabricar nuevamente cartón, terminará sus días dividido en pequeñas piezas enteladas que no serán otra cosa que los Buzonela Mini.


El público dirá si es una pieza exitosa, como sus hermanos mayores, o pasará sin pena y gloria por el ancho sendero de las artesanías que se realizan en Argentina. Lo si creo que es un pieza atractiva, incluso, para los coleccionistas que suelen pulular por todas partes. Mientras escribo estas líneas pienso en un coleccionista de buzones que conocí gracias a mis buzones alcancías entelados. Tendré que mandarle un mail con esta novedad, seguro que despertará su interés esta nueva pieza del gran catálogo de mis artesanías enteladas.

Ahora, ustedes cibernautas, conocen al nuevo Buzonela Mini. En ustedes está el éxito o fracaso de este nuevo buzón decorativo. El tiempo dirá si me equivoqué en su realización o si logré una pieza atractiva para los consumidores de artesanías de Argentina.

Espero que el Buzonela Mini tenga larga vida. De mi parte tiene toda la experiencia para realizarlo y toda la pasión para lograr algo diferente a todo lo visto hasta el momento. O al menos haré el esfuerzo por salir de lo visto hasta el hartazgo. Ser original no es fácil y menos aún en pleno siglo XXI. Todo está visto… o casi todo.

¡Vamos Buzonela Mini!

Mauricio Uldane

Artesano entelador y padre de los Buzonela